http://plataformacelac.org/es/derecho-alimentacion/mex
EL DERECHO A LA ALIMENTACIÓN Y SALUD EN MÉXICO.
MARCO JURÍDICO DEL DERECHO A LA ALIMENTACIÓN
Los Estados Unidos de México en su Constitución Política de 1917, reconoce el derecho a la alimentación de forma explícita, al decir en su artículo cuarto que “toda persona tiene derecho a la alimentación nutritiva, suficiente y de calidad”, lo cual será garantizado por el Estado, al igual que el derecho a la protección de la salud y el derecho al acceso, disposición y saneamiento del agua para consumo personal y domestico en forma suficiente. En el mismo artículo se hace mención a que los niños y niñas tienen derecho a la satisfacción de sus necesidades de alimentación, salud, educación, y sano esparcimiento para su desarrollo integral.
Por otra parte, en el artículo segundo de la Constitución se hace garante a la Federación, los Estados y Municipios de apoyar la nutrición de los indígenas y familias migrantes mediante programas de alimentación, en especial con la población infantil.
http://www.elfinanciero.com.mx/opinion/exigencias-para-la-esperanza.html
EL FINANCIERO
25 de septiembre del 2017
Exigencias para la esperanza.
Texto de OFELIA MEDINA
Maravillada ante la ingeniosa e incansable participación de mujeres y hombres hartos de tanta corrupción e inmoralidad, siento renacer la esperanza. Esperanza en una sociedad civil que ayuda y exige, demuestra que la acción nace de acuerdos y del sentido común. Han pasado estos días coordinando, comunicando mensajes de necesidades que, en bicicletas, motos y a pie, han resuelto. Muchas personas se han quitado la tortilla de la boca para darla a quien tiene más hambre.
No necesitamos a esta podrida clase política que como aves de rapiña vuela sobre la desgracia para apoderarse de todo. No necesitamos autoridades que tienen prisa por empezar una reconstrucción para meter sus constructoras, sus inmobiliarias y hacer sus businessdestruyendo el tejido social y llenando de dolor y desesperanza.
Exigimos que las acciones gubernamentales estén asesoradas por expertos en logística, no por banqueros. Que se cumplan los plazos internacionalmente reconocidos para la emergencia y la reconstrucción. Que se cumpla con los derechos de los damnificados a techo, comida, agua.
¿Para qué está el ejército? ¿Para proteger a las televisoras que tratan de embrutecernos con sus shows? Ellos podrían resolver estos problemas. El ejemplo de organización y autogestión de la gente de México nos anima. La incapacidad, irresponsabilidad, inmoralidad y ambición del gobierno mexicano nos indigna.
http://www.excelsior.com.mx/nacional/2017/09/12/1187765
EXCELSIOR
México social: cuando el hambre no se erradica.
Hay 881 mil hogares en donde un niño comió sólo una vez al día o dejó de comer todo el día. Asimismo, en 10.75 millones de los hogares donde hay un niño se tuvieron dificultades para satisfacer sus necesidades alimentarias.
Ciudad de México.
12 de septiembre del 2017.
A pesar de todos los programas alimentarios y de que los datos oficiales estiman una ligera recuperación en el ingreso de los hogares más pobres, en todo el país hay personas que no tienen nada que comer y en millones de hogares existe la genuina preocupación de quedarse sin recursos para poder alimentarse.
En ese sentido, la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto en los Hogares (ENIGH, 2016), presentada recientemente por el Inegi, da cuenta no de un país en proceso de recuperación de la pobreza sino, por el contrario, de un modelo que reproduce estructuralmente la pobreza y la desigualdad.
El miedo a no comer.
Es difícil imaginar cómo puede ejercerse la libertad cuando se vive con el miedo permanente de quedarse sin recursos para comer. Amartya Sen señalaba precisamente que la libertad de agencia es tener la posibilidad de plantearse proyectos autónomos de vida, pero que ello requiere de la satisfacción mínima de las necesidades básicas (libertad de bienestar). Eso está fracturado en nuestro país.
En efecto, de acuerdo con el Inegi, 42.4% de los hogares señalan haber tenido preocupación, en los tres meses previos a la encuesta, de que la comida se acabara. De hecho, el instituto estima que en ocho entidades 50% o más de los hogares manifestaron dicho temor: en Tabasco, 63.3%; en Oaxaca, 60.4%; en Guerrero, 55.5%; en Chiapas, 55.1%; en Campeche, 50.8%; en Tlaxcala, 50.5%; en Veracruz, 50.5% y en Hidalgo, 49.8%.
De la percepción a la realidad.
Frente a tales datos, hay quienes sostienen que se trata de un asunto “de percepción”. Sin embargo, el propio Inegi estima que en 2016 en 11.8% de los hogares se manifestó que, efectivamente, se quedaron sin comer. El dato es inmenso, pues en el país hay 33.46 millones de hogares, lo que significa que en 3.11 millones de hogares no hubo, al menos una vez en los últimos tres meses, alimentos por falta de recursos económicos.
El Inegi documenta que hay 15 entidades que superan el porcentaje señalado: Tabasco (uno de los principales productores de carne en el país), con 30%; Oaxaca, con 18.6%; Sinaloa (el principal productor de alimentos en México), con 16.6%; Sonora (el principal productor de carne), con 16%; Veracruz y Guerrero, con 14.7% cada uno; Michoacán, con 13.6%; Hidalgo, 13.5%; Colima y Chihuahua, 13.3%, cada uno de ellos; Nayarit, 13.2%; Baja California Sur, 13%; Chiapas, 12.6%, y Tlaxcala con 12.2% de los hogares que se han quedado alguna vez sin comer.
Comidas a medias.
El dato previo debe complementarse con el relativo al porcentaje de adultos que en los hogares mexicanos se quedó al menos una vez sin desayunar, sin comer o sin cenar. El promedio nacional es de 13.9%, pero con 17 entidades en las cuales se rebasa ese indicador.
El más elevado se registra en Tabasco, con un 35.8% de los hogares con la característica señalada; Oaxaca, con 19.8%, Guerrero con 19.3%; Michoacán, con 18.5%; Campeche, con 17.9%; Veracruz, con 16.4%; Hidalgo con 16.3%; Tlaxcala, con 15.8%; Sonora, con 15.3%; Colima, con 15.2%; San Luis Potosí, con 15%; Tamaulipas, con 14.8%; Sinaloa, con 14.6%; el Estado de México y Baja California Sur, con 14.5% cada uno de ellos; y Guanajuato y Nayarit, con 14.1%.
El escándalo: la niñez con hambre.
De acuerdo con el Inegi, se estima que en 2016 había al menos 10.75 millones de hogares con algún menor de 18 años en los que se tuvieron dificultades para satisfacer sus necesidades alimentarias. Se trata de casi la tercera parte de los hogares mexicanos, dato que constituye, literalmente hablando, un escándalo.
Entre esos 10.75 millones, el Inegi estima que en 28% de ellos, alguna niña, niño o adolescente comió menos de lo que debería comer; pero una vez más, hay 17 entidades en las que se supera esa proporción: Tabasco, con 46.6%; Oaxaca, con 37.4%; Michoacán, con 33.7%; Guerrero, con 31.1%; Sinaloa, con 30.9%; Hidalgo y Sonora, con 30.7% cada una de ellas; Puebla, con 30.6%; Guanajuato, con 30.1%; Baja California Sur, 30%; Colima, 29.8%; Campeche, 29.6%; Tlaxcala, 29.1%; San Luis Potosí, 28.7%; Yucatán, 28.4%; Morelos, con 28.2%, y Chihuahua, con 28%.
Otro indicador que llama a la indignación es el relativo a 8% de los hogares en donde hubo alguna dificultad para comer (881 mil hogares), y en donde alguna niña o niño comió sólo una vez o dejó de comer todo un día. Se trata de al menos un millón de niños con hambre, ante quienes tenemos una deuda ética mayúscula.
Frente a ello, debe subrayarse que hay 15 entidades en las que se rebasa el promedio nacional: Tabasco, con 19.8%; Sonora, con 11.5%; Oaxaca, con 11.4%; Baja California, con 10.3%; Michoacán y Chihuahua, con 10.1% cada uno; San Luis Potosí, con 9.8%; Sinaloa, con 9.6%; Coahuila, con 9.5%; Guerrero, con 9.4%; Durango, con 9%; Puebla y Guanajuato, con 8.7%; Hidalgo, con 8.6%, y Campeche, con 8.4%
http://www.imagenradio.com.mx/la-sombra-del-hambre-y-la-pobreza-en-mexico
La sombra del hambre y la pobreza en México.
Imágen Radio.
3 marzo 2017.
Esta administración federal inició en 2012 con dos perspectivas que, en lo social, eran promisorias: a) por primera vez en la historia reciente del país, se asumió que el hambre era el gran problema a resolver, y b) el Ejecutivo Federal utilizó su primera iniciativa preferente para proponer la creación de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
En 2015, los datos que presentó el Inegi, a través de la Encuesta Intercensal, muestran que el reto sigue ahí y que en este sexenio también van a dejarse saldos muy importantes.
El tema del hambre es sin duda especialmente sensible cuando se habla de niñas y niños pues, como se observa en las cifras, habría al menos 3.71 millones de ellos que viven importantes deficiencias nutrimentales; lo cual contrasta además con el dato de la ENSANUT, respecto del incremento de la prevalencia de obesidad y sobrepeso en ese grupo de población.
Las contradicciones apuntan también al hecho de que, siendo la 14ª economía planetaria, tengamos tales niveles de pobreza y carencia social, y tales niveles de incumplimiento de los derechos de las niñas, niños y adolescentes en todo el país. Y frente a ello, quizá lo más preocupante sea que, incluso en el discurso oficial, ambas agendas fueron abandonadas.
http://www.jornada.unam.mx/2017/03/01/edito
La Jornada
México, país con hambre.
1 marzo 2017.
De acuerdo con los datos de evolución de carencias sociales presentados por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), uno de cada cinco mexicanos sufre la falta de acceso a la alimentación, lo que en lenguaje llano quiere decir que padece hambre. Esta situación prevalece pese a que, según afirma el organismo, entre 2014 y 2015 se presentó una reducción en los seis indicadores de carencias sociales: por acceso a la seguridad social, por acceso a la alimentación, de acceso a los servicios de salud, acceso a servicios básicos en la vivienda, rezago educativo, y por calidad y espacios de la vivienda.
Es necesario considerar que en este momento no se dispone de un panorama completo de la pobreza en nuestro país, sino únicamente de informes puntuales acerca de las carencias que la conforman, debido al conflicto que surgió en 2016 entre el Coneval, organismo encargado de determinar los niveles de pobreza y observar los programas sociales en México, y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), responsable de proveer la información estadística a partir de la cual opera el Coneval. Debe recordarse que en el levantamiento del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015 el Inegi provocó una distorsión en los indicadores al modificar la metodología de las encuestas, por lo cual el Coneval se negó a calcular la evolución de la pobreza a partir de datos no comparables con años anteriores.
De tal manera, las cifras más recientes con las que se cuenta son las correspondientes al periodo 2012-2014. Entonces se estimaba que sólo dos de cada 10 mexicanos vivían libres de cualquier forma de pobreza o vulnerabilidad, mientras 55.3 millones de personas –46.2 por ciento de la población nacional– eran consideradas pobres, al encontrarse debajo de la línea de bienestar mínimo, y 11.4 millones –9.5 por ciento– sufrían de pobreza extrema.
Mientras el Coneval espera los datos correctos para presentar un informe completo, lo que se evidencia es la persistencia de condiciones inaceptables para una proporción tristemente estable de los mexicanos. Así lo muestra la raquítica reducción de la carencia por acceso a la alimentación, la cual habría pasado de 23.4 a 21.7 por ciento en el periodo 2014-2015, dando cuenta de que una quinta parte de la población vive, para decirlo de manera clara, en la miseria.
Semejante panorama pone en entredicho la credibilidad en materia económica y social de reformas constitucionales, políticas públicas, programas sociales, declaraciones y, en conjunto, de toda acción de Estado presuntamente destinada a propiciar el desarrollo nacional, pues resulta de sentido común que un país con 20 por ciento de habitantes mal alimentados tendría que empezar por resolver ese flagelo; de otra manera, las políticas públicas en todos los otros ámbitos estarán construidas sobre arena.
En otros términos, mientras una quinta parte de la población carezca de alimentación suficiente, resulta iluso pensar que pueden resolverse el resto de los problemas que aquejan al país: ni los exasperantes índices de violencia y criminalidad que azotan amplias franjas del territorio ni los graves rezagos experimentados en materia educativa o de salud pública admiten soluciones que pretendan obviar las carencias más básicas de los pobres y de los pobres entre los pobres.
Publimetro
Urge frenar violencia y desnutrición infantil en México, advierte Unicef.
El representante de Unicef en México, Christian Skoog dijo que preocupa mucho la violencia en contra de los niños en el país.
*Con información de Israel Zamarrón
3 de mayo del 2017.
La Unicef urgió a México a atender los problemas de violencia, desnutrición y obesidad infantil, por ser los más significativos entre los menores.
El representante de Unicef en México, Christian Skoog refirió que “preocupa mucho” la violencia hacia los niños en todas sus formas, como homicidios, en casa y en materia migratoria.
Al presentar el ‘Informe Anual 2016: retos y avances para la niñez en México’, comentó que en el país seis de cada 10 niños ha vivido algún tipo de violencia en el hogar, y la mitad de los adolescentes han padecido agresión psicológica.
El documento refiere que uno de cada 15 niños ha recibido alguno forma de castigo físico severo como jalones de oreja, bofetadas, manotazos o golpes fuertes como método de disciplina.
Con base en cifras oficiales del país y de Unicef, el informe añade que en 2015 se contabilizaron mil 57 homicidios de niñas y niños; es decir 28 homicidios por día.
Mientras que los asesinatos de adolescentes entre 15 y 17 años se incrementaron 3.8% ente 2014 a 2015.
La organización Save the Children advierte que de las 30 mil muertes infantiles al año, 41% se registra antes de cumplir el primer mes de vida.
Datos de su reporte de 2016, indican que atendió a 37 mil 375 niñas, niños y adolescentes en materia de salud y nutrición.
Niños desnutridos y con obesidad.
Christian Skoog agregó que otro tema que urge atender es la desnutrición crónica, ya que se padece entre niños con bajo peso y con sobrepeso u obesidad.
Manifestó que los niños con problemas de sobrepeso están comiendo mucho pero no de forma correcta.
Recordó que de los 40 millones de niños qué hay en México, 54% —21 millones— vive en condiciones de pobreza y 1.5 millones sufren desnutrición crónica. En el informe Unicef cita que 5% de los menores de cinco años tiene obesidad; y dos de cada 10 niños y niñas menores de cinco años que viven en zonas rurales presentan desnutrición crónica. Datos oficiales señala que en México que 58% de menores entre 10 y 14 años son físicamente inactivos.
Educación un eterno pendiente en niños.
El representante de Unicef abundó que la educación y pobreza siguen siendo temas donde México aún debe poner atención para fomentar el buen desarrollo de los niños.
En entrevista señaló que actualmente más de cuatro millones de niños, niñas y adolescentes están fuera de la escuela, y más de 600 mil podrían dejarla si no se crean estrategias para evitarlo. En tanto que Save the Children reporta que existen seis millones de niños fuera del sistema educativo, de los cuales 50% trabaja. Además se han contabilizado ocho millones de menores que no acceden a los servicios básicos de salud.
Lupa a niños migrantes.
Christian Skoog agregó que también se debe poner atención hacia los niños migrantes que son deportados porque en ocasiones llegan solos al país y necesitan de todos los servicios. Unicef informa que en 2016 hubo 13 mil 746 repatriaciones de niños, niñas y adolescentes mexicanos desde Estados Unidos, 70% de ellos viajó sin las compañía de un adulto. Otros 40 mil 542 menores extranjeros fueron detenidos y ocho de cada 10 fueron repatriados desde México. Los menores extranjeros procedían de Guatemala (41%), Honduras (29%) y El Salvador (25%).
http://www.animalpolitico.com/2017/04/desnutricion-obesidad-costo-mexico/
Animal Político.
Abril 2017.
Desnutrición y obesidad cuestan a México más de 28 millones de dólares al año: Cepal.
De acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en toda la región las transformaciones demográficas, epidemiológicas y nutricionales han llevado a que la desnutrición disminuya, mientras aumenta el índice de sobrepeso y obesidad.
El informe ‘El costo de la doble carga de la malnutrición’ de la Cepal muestra que la malnutrición ha repercutido económicamente en la economía de los países. En el caso de México, ésta ha tenido consecuencias en morbilidad y mortalidad, así como en el rendimiento académico y la productividad laboral, lo que le ha costado al país el 2.3% del PIB, lo cual equivale a 28.800 millones de dólares al año.
Sobre el sobrepeso y la obesidad, el organismo estima que en una proyección realizada hasta el año 2078, en México estas condiciones generarán un costo anual total de 13.000 millones de dólares.
Hasta 2014, el costo en salud por atender padecimientos como la diabetes e hipertensión fue de 6.134 millones de dólares. Este costo, según las proyecciones de la Cepal crecerán aproximadamente 70%.
Las consecuencias de la malnutrición.
En los últimos 65 años, en México la desnutrición crónica ha causado más de dos millones de muertes prematuras y se calcula que aproximadamente que una de cada seis infecciones respiratorias agudas y entre el 3% y 4% de los episodios de diarrea en niños pueden atribuirse a la desnutrición.
Esta desnutrición afecta principalmente a los niños, quienes disminuyen su rendimiento escolar ya que les impide el desarrollo congnitivo y limita su capacidad de aprendizaje, lo que se traduce en una alta probabilidad de incorporación tardía, repetición de cursos, abandono y bajo rendimiento escolar general.
En México, los niños que padecen desnutrición tienen una probabilidad 11 veces menor de completar la educación secundaria respecto a los niños que no la padecen; asimismo, el 16% de las repeticiones de cursos se atribuyen a esta condición de salud.
Por el otro lado, el sobrepeso y la obesidad en adultos son el factor que causa al menos 21 millones de casos de enfermedades no transmisibles en México. La hipertensión y la diabetes tipo 2 representan entre 90 y 95% de los casos de enfermedades relacionadas. Según la Cepal, el aumento de la carga de estas enfermedades puede situarse en torno al 50% entre el presente y 2030, lo que afectaría la mortalidad en el país en un 26%.
El sobrepeso y la obesidad cuestan al país aproximadamente 900 millones de dólares debido a las muertes prematuras y al absentismo laboral.
Para 2078, estima la Cepal, la pérdida de productividad por sobrepeso y obesidad será de 114.800 millones de dólares en México; la pérdida por desnutrición, estiman, será de 114.800 millones de dólares.
Ambos problemas se agudizan en países de ingresos medios, donde los procesos económicos y cambios en el estilo de vida dan lugar a una dieta excesiva y a enfermedades relacionadas con ella.
Por ello, la Cepal recomienda a los países de la región diseñar políticas nutricionales y de salud que aborden a la malnutrición con un enfoque multicausal (de acceso a servicios básicos y alimentos seguros, hábitos alimenticios, etc.) y priorizar la intervención temprana con madres e infantes desde su gestación y hasta los 1000 primeros días de vida.
http://suracapulco.mx/9/guerrero-las-cifras-de-la-ignominia/
Guerrero: Las cifras de la ignominia.
23 de agosto del 2016.
La jefa de Política Pública de la Unicef México, Erika Strand, señaló que los niños y niñas de familias mexicanas en situación de pobreza, que habitan en zonas rurales y que pertenecen a la población indígena, son los que tienden a enfrentar las mayores desventajas.
28 de junio del 2016.
Durante la presentación del informe anual del "Estado mundial de la infancia 2016", la experta destacó que en 2014, nueve de cada 10 menores que hablan una lengua indígena estaban en pobreza, mientras que 21.4 millones de la población total del país de 0 a 17 años, se encontraba en la misma condición. En el informe que se da en el marco del 70 aniversario del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) en el mundo, Strand recordó que en 2014, 23.75 por ciento de las mujeres mexicanas se casaron por primera vez antes de cumplir los 18 años de edad.
En ese sentido, precisó que los tres estados de la República Mexicana con mayor porcentaje de matrimonio infantil en México son Chiapas con 44.82 por ciento, Guerrero con 42.41 por ciento y Oaxaca con 39.17 por ciento, tres de los estados con mayor rezago en el país.
A nivel nacional, dijo, dos de cada mil niñas y adolescentes de 10 a 14 años procrearon cuando menos un hijo, cifra que ascendía a cuatro de cada mil en el caso de Guerrero y Chiapas.
Ante ello, destacó que es necesario que el gasto en desarrollo humano (salud, educación e ingreso), destinado a la infancia, beneficie de manera prioritaria a la niñez indígena.
Strand refirió que de acuerdo con el informe anual, en México se produjeron grandes avances en materia de reducción de la mortalidad infantil, en el número de niños y niñas que van a la escuela y en la cobertura de vacunación.
Lo anterior, toda vez que entre 1990 y 2014, la tasa de mortalidad en menores de cinco años se redujo 63 por ciento, al pasar de 41 por cada mil nacidos vivos a 15.1.
Mientras que en ese mismo periodo, la tasa de mortalidad infantil de niños menores de un año se redujo de 32.5 a 12.5, lo que representa una disminución de 61.5 por ciento.Explicó además que en 2015, 85 por ciento de los niños y niñas de entre tres y 17 años asistieron a la escuela, con un aumento de cuatro puntos porcentuales entre 2010 y 2015.
A nivel nacional la prevalencia de baja talla en menores de cinco años en las áreas rurales (20.9 por ciento) es casi el doble que en las áreas urbanas (11.1 por ciento). El informe precisó que 20 por ciento de los niños, niñas y adolescentes con menor Índice de Desarrollo Humano en el país, debió captar 38.6 por ciento del gasto público, sin embargo, sólo recibió 15.2 por ciento.
Al mismo tiempo, 20 por ciento con mayores niveles de vida, debía recibir 8.9 por ciento del gasto pero obtuvo un 24.2 por ciento.
"En tiempos de austeridad, es estratégico impulsar que las medidas económicas anticíclicas mantengan el nivel de inversión en la niñez, sobre todo la primera infancia y la población más vulnerable, ya que es el retorno con mayores ganancias para México", añadió.
COMPROMISO DE MÉXICO CON SUS INDÍGENAS.
En 1992, México reformó su Constitución para incluir en su artículo 4 la definición del país como multicultural y plurilingüe. Este paso constituyó un reconocimiento fundamental de la población indígena en un país que durante años procuró lograr la unidad nacional mediante la homogeneización cultural.
En el campo de la educación se han tomado varias medidas de integración, como la creación del Consejo Nacional para el Fomento Educativo (Conafe) que brinda educación primaria a las pequeñas comunidades rurales dispersas; la Dirección General de Educación Indígena y el modelo de educación intercultural bilingüe.
Sin tiempo para crecer
Según los datos del estudio sobre la infancia entre los pueblos indígenas hecho por Unicef:
-Los tres estados de la República Mexicana con mayor porcentaje de matrimonio infantil en México son Chiapas con 44.82 por ciento, Guerrero con 42.41 por ciento y Oaxaca con 39.17 por ciento.
-Dos de cada mil niñas y adolescentes de 10 a 14 años procrearon cuando menos un hijo, cifra que ascendía a cuatro de cada mil en el caso de Guerrero y Chiapas.
En la pobreza, 78% de los niños indígenas en México; pide CNDH respeto a la diversidad.
30 de abril del 2015.
CIUDAD DE MÉXICO (proceso.com.mx).- El 78.6% de los menores en hogares indígenas se encuentran en situación de pobreza, por lo que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) llamó a promover acciones en favor de los niños indígenas, con la pertinencia cultural que permitan el desarrollo pleno, así como el respeto a la diversidad, pues de acuerdo con el Reporte Pobreza y derechos sociales de niñas, niños y adolescentes en México 2014, presentado por el Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), el 90.8 por ciento de quienes hablan una lengua indígena se encuentra en situación de pobreza.
Por ello, la CNDH destacó que las niñas, niños y adolescentes indígenas tienen derechos específicos como integrantes de los pueblos originarios, como la preservación y goce de sus culturas, lenguas y tradiciones que el Estado debe promover.
En el marco del Día del Niño, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), afirmó que el reto de México es cristalizar en los hechos el nuevo paradigma en que los menores son titulares plenos de derechos.
“Es preciso que el reconocimiento de sus derechos se traduzca en su aplicación efectiva, que se genere un cambio cultural de todas y todos los mexicanos basado en el respeto, protección y garantía de los derechos fundamentales de la niñez y la adolescencia, y en donde el trabajo coordinado permita lograr el mayor impacto a corto, mediano y largo plazos para que disfruten de los servicios y oportunidades para su pleno desarrollo”, señaló.
Y sostuvo que “es necesario reconocer que prevalece la desigualdad, inequidad, pobreza, discriminación, violencia, explotación y trabajo forzado en la realidad de personas menores de edad, cuya voz es anulada por voluntades todavía reticentes al reconocimiento de sus derechos contenidos en instrumentos internacionales, la Ley General y leyes locales de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes”.
Según el reporte de Coneval y Unicef, de los 4.7 millones de los niños mexicanos que viven en pobreza extrema, el mayor porcentaje se encuentra en las comunidades indígenas. “El 78.6 por ciento de niñas, niños y adolescentes en hogares indígenas y el 90.8 por ciento de quienes hablan una lengua indígena se encuentra en situación de pobreza”, cita la CNDH.
Menciona que el diagnóstico mostró también que para el 2014, 21.4 millones de personas en el rango de 0 a 17 años de edad carecían de las condiciones mínimas para garantizar el ejercicio de uno o más de sus derechos sociales, a la alimentación, educación, protección de su salud, a una vivienda de calidad y con servicios básicos, entre otros.
“Por ello se debe reconocer que, a pesar de los avances normativos en la materia, como la ratificación en 1990 de la Convención sobre los Derechos del Niño o la publicación en 2014 de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, aún están pendientes adecuaciones en disposiciones locales y políticas públicas integrales que atiendan a la situación de vulnerabilidad en que se encuentran niñas, niños y adolescentes, especialmente aquellos que padecen una discriminación múltiple”.
Por lo anterior, la CNDH hizo un llamado a multiplicar esfuerzos para abatir los obstáculos que inciden de manera negativa en el ejercicio de los derechos humanos de niñez y adolescencia, y “para que los organismos públicos de derechos humanos, en el ámbito de su competencia, propicien que se garantice el cumplimiento de la política nacional en materia de derechos de niñas, niños y adolescentes, así como fortalecer las áreas especializadas para la protección efectiva, observancia, promoción, estudio y divulgación de sus derechos, como los mandata la Ley General”.
MURIERON 15 NIÑOS POR DESNUTRICIÓN EN LA MONTAÑA DE GUERRERO: TLACHINOLLAN.
14 de septiembre del 2015
http://www.elfinanciero.com.mx/archivo/en-mexico-millones-de-ninos-con-desnutricion.html
En México, 1.5 millones de niños con desnutrición.
Miriam de Regil.
12 diciembre del 2013
En México hay todavía un millón y medio de niños menores de cinco años con desnutrición crónica, es decir el 13.6 por ciento del total de la población de esa edad, advirtió José Ignacio Ávalos, presidente de Un kilo de ayuda.
Durante la presentación del Ranking Nacional de Nutrición Infantil (Ranni), documento elaborado por dicha organización con datos de la Encuesta Nacional de Salud Pública (Ensanut 2012), Ávalos explicó que a nivel mundial el país ha retrocedido en el combate de la desnutrición, pues en seis años ese problema pasó de 12.4 a 13.6 por ciento.
Informó que la República Mexicana se ubica hoy en el lugar 18 en desnutrición crónica entre 101 naciones, sin tomar en cuenta a las que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El informe destaca que en nueve entidades el nivel de desnutrición es mayor al promedio nacional. Entre éstas sobresalen Chiapas, Guerrero y Oaxaca con 31.4, 23.7 y 20.7 por ciento, respectivamente.
En tanto, los indicadores más bajos los tiene Sonora, Colima y Baja California Sur con 5.1, 5.7 y 7.1. por ciento.
Los mayores retrocesos en desnutrición crónica los registra el estado de Tamaulipas, seguido por Tlaxcala, Nuevo León, Chihuahua, Colima, Puebla, Baja California, Zacatecas, Nayarit, el Distrito Federal y Aguascalientes.
Ante representantes de organismos internacionales y funcionarios federales, José Ignacio Avalos sostuvo que la Cruzada Nacional contra el Hambre no fija objetivos ni metas para acabar con la desnutrición crónica.
Anemia, también en ascenso
El documento destaca que en lo que respecta al problema de la anemia, el promedio de México es hoy de 23.3 por ciento de su población infantil menor de cinco años, es decir, dos millones de infantes, lo cual coloca al país con niveles arriba del promedio mundial que es de 18 por ciento.
Los menores de dos años son las principales víctimas de anemia. Los estados con más registros de este problema son Campeche con 34.5 por ciento; Guerrero con 30.2 por ciento y Guanajuato con 28.4 por ciento.
Las entidades mexicanas con más retrocesos en la prevalecía de anemia son: Nuevo León, Guanajuato, Morelos, Chiapas, Quintana Roo, Campeche, Jalisco y Tamaulipas.
Con esos dos millones de niños mexicanos menores de cinco años que padecen anemia, la conclusión es que en nuestro país el nivel de anemia es superior al de África.
Además, el 23 por ciento en promedio nacional que revela del Ranking de Nutrición Infantil es también superior al promedio mundial que es de 18 por ciento.
Lactancia materna
A su vez, los índices de prevalencia de la lactancia materna exclusiva (cuya medición es inversa a las dos anteriores), ubica al promedio nacional en 14.4 por ciento y a Aguascalientes en el primer sitio con 1.3 por ciento, seguido de Tamaulipas con el mismo porcentaje y a Baja California Norte con 5.3 por ciento.
En tanto, la mayor prevalencia de este indicador se encontró en Oaxaca con 34.7 por ciento; seguido de Zacatecas con 34.1 por ciento; Baja California Sur con 26.2 por ciento; Hidalgo con 24.3 por ciento; Jalisco con 23.4 por ciento y Durango con 21.6 por ciento.
Mauricio Hernández, director del Instituto Nacional de Salud Pública, aseguró que estados como Chiapas, Guerrero y Oaxaca siguen concentrando la mayor parte de los niños con falta de alimentación, a pesar de sus avances en este índice.
“Un niño que nace en Chiapas tiene seis veces más de posibilidades de vivir con desnutrición, estos resultados nos demuestran la falta de equidad que aún existe en el país”, señaló.
El Ranni, explicó Ávalos, es un instrumento con base en las Encuestas Nacionales de Salud y Nutrición (Ensanut), que determina una posición entre estados y es actualizado cada que se generan datos en materia de desnutrición crónica, anemia y lactancia materna exclusiva.
Guerrero tiene municipios tan pobres como algunos países de Africa
30 enero 2011
Fuente: CNNMéxico
Enclavado en la zona montañosa del estado sureño de Guerrero, se encuentra Cochoapa el Grande, el municipio más pobre de México, con niveles de miseria que se equiparan a los países africanos como Mali o Malawi, según el último reporte del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Como consecuencia, su población sigue muriendo de enfermedades como gripas e infecciones estomacales que no representan un riesgo para la salud en el resto del país.
Esta localidad de casi 16,000 habitantes es parte de una entidad que a su vez ocupa el segundo lugar nacional en pobreza por la proporción de su población que vive en condiciones de miseria.
El informe Multidimensional de Pobreza 2008 del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) —el más reciente disponible— estimó que siete de cada 10 guerrerenses carecen de lo suficiente para cubrir las necesidades básicas relacionadas con la alimentación, la vivienda y la educación.
Únicamente Chiapas, donde ocho de cada 10 viven con carencias, supera al estado en esta condición, que también es famoso internacionalmente por sus destinos turísticos como Acapulco o Ixtapa Zihuatanejo.
Los altos niveles de marginación han colocado a Guerrero como el estado en el que la mayor cantidad de mujeres mueren al momento de dar a luz—126.7 mujeres por cada 100,000 nacidos, el doble que el nivel nacional— y donde uno de cada cinco niños padecen las consecuencias de la desnutrición.
Abel Barrera, director del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, identifica dos consecuencias directas de los altos niveles de pobreza: la migración y la siembra de enervantes.
Guerrero es, junto con Oaxaca, uno de los estados que más migrantes expulsan del país. El Instituto Nacional de Estadística, Geografía y Estadística (INEGI) calcula que cada año más de 73,000 guerrerenses abandonan el país en busca de un trabajo mejor remunerado en Estados Unidos.
"En la Montaña, por ejemplo, la mayoría de gente se está yendo a Nueva York y se habla precisamente de que después de Acapulco, la ciudad guerrerense más grande está en Chicago. Esto nos habla de que la población económicamente activa está fuera del estado por falta de oportunidades de trabajo", explicó Barrera en entrevista telefónica.
Guerreo también ocupa el primer lugar en cuanto a producción de amapola en el país, ya que en su territorio se genera el 60% de este enervante ilícito, según información de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). El precio por el kilo de goma de amapola puede oscilar entre los 5,000 y 15,000 pesos, de acuerdo con investigaciones del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan.
"Aquí es donde vemos cómo toda la cuestión relacionada con el problema del narcotráfico en cuanto a siembra, el eslabón más débil se encuentra precisamente concentrado en el estado de Guerrero en las regiones indígenas", dice Barrera.
"Ahí es donde vemos las paradojas de cómo este negocio ilícito que está generando tanta violencia también ahora tiene sometidos y semiesclavizados a la gente que está orillada a involucrarse en este tipo de cultivo ilícitos".
La pobreza como discurso político
La situación en la que viven los habitantes de la región de la Montaña de Guerrero no es desconocida ni por las autoridades federales ni estatales.
En julio del 2005, el entonces presidente Vicente Fox, visitó la región como parte de una gira que realizó por la entidad. Tras haber preguntado a los habitantes qué era lo que les faltaba, el mandatario prometió mayores recursos y en el 2007 se fundó el Hospital de la Madre y del Niño en el municipio de Tlapa, a casi cuatro horas de Cochoapa el Grande, que buscaba poner fin a los altos índices de mortalidad materna.
En enero del 2006, el ex candidato a la Presidencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Andrés Manuel López Obrador visitó Metlatónoc, el municipio vecino a Cochoapa el Grande como parte de su campaña y también prometió acabar con la pobreza de llegar a Los Pinos. Sin embargo, Felipe Calderón, candidato del Partido Acción Nacional, fue el vencedor de la contienda.
Para Barrera, ningún partido ha podido acabar con los niveles de marginación que se viven en esta región del país. Aún con la llegada del PRD al poder en el 2005, tras 70 años de mandato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dice, las cosas no han dejado de empeorar.
"A la gente le ha quedado claro que independientemente de quiénes estén en el poder del partido que sea, como ya pasó en Guerrero, las cosas siguen peor, no igual, están peor", dijo.